Agotamiento de los profesionales de la salud

El agotamiento se caracteriza por un alto grado de cansancio emocional y despersonalización (por ej., cinismo) y poca sensación de realización personal en el trabajo. Todos podemos agotarnos, pero es especialmente preocupante cuando les ocurre a los profesionales de la salud por el posible impacto en nuestro sistema de salud y bienestar colectivo. El agotamiento se asocia a un riesgo de desafíos de salud mental, como la ansiedad y la depresión. Sin embargo, el agotamiento no es un diagnóstico de salud mental individual. El agotamiento es un problema laboral que requiere soluciones orientadas al sistema en el ámbito de la organización.

Consulte cómo se encuentran los profesionales de la salud que conozca. Ayúdelos a permanecer conectados. Pregúnteles cómo están y cómo puede ayudarlos. Preste atención a las señales de alerta que puedan indicar que necesitan ayuda profesional de un proveedor de salud mental. Las conductas comunes a las que hay que prestar atención son: mayor irritabilidad, alejamiento de los amigos y la familia, juicio disminuido, uso excesivo de alcohol o sustancias, menor habilidad para manejar las emociones y los impulsos y peor higiene personal.

Para reducir la presión en el sistema de salud y sus profesionales, cuide su salud lo mejor posible y siga los lineamientos de salud pública locales. Como paciente, sea amable con los profesionales de la salud. Reconocer la presión que reciben los profesionales de la salud puede ser de gran ayuda.

El agotamiento de los profesionales de la salud tiene consecuencias dañinas en el cuidado y la seguridad de los pacientes. Eso incluye que el proveedor pase menos tiempo con el paciente, que haya más errores médicos e infecciones hospitalarias entre los pacientes y que falte personal.

Sabemos que el agotamiento es costoso a nivel humano y sistémico, pero puede resultar difícil de evaluar y no se mide consistentemente. Mis recomendación es que las organizaciones e instituciones relacionadas evalúen, midan e intervengan regularmente para prevenir el agotamiento.

El Compendio de recursos para el bienestar de los profesionales de la salud de la Academia Nacional de Medicina frece una colección de herramientas de medición basadas en la evidencia para uso de las organizaciones. Los datos deben ser confidenciales y evaluados según raza, origen étnico, edad, unidades departamentales, rol y niveles de antigüedad para comprender las diferencias y aprender a identificar intervenciones a medida.

Las organizaciones sanitarias pueden implementar políticas, programas y soluciones basadas en la evidencia que identifiquen, aborden y ayuden a prevenir el agotamiento de los profesionales de la salud. Hay muchas oportunidades para fortalecer el ambiente y la cultura de las organizaciones para que sean más seguras, generosas y justas para todos los profesionales de la salud.

Podemos comenzar escuchando a los profesionales de la salud y promoviendo que se involucren para mejorar procesos, flujos de trabajo y la cultura de la organización. Las instituciones pueden: destinar tiempo y promover que todos los profesionales de la salud de la nómina se tomen licencias pagas, licencias por enfermedad, licencias para cuidado de familiares y descansos; establecer una política de tolerancia cero para la violencia; priorizar el uso de equipos de protección personal adecuados; incrementar la autonomía y flexibilidad de los horarios de trabajo; y combatir los prejuicios, el racismo y la discriminación en el lugar de trabajo. Descargue las recomendaciones para obtener más información.